El extraño caso del Dr Jekyll y Mr Hyde de Robert Stevenson y la película Mary Reily de Stephen Frears son dos obras qué, a pesar de compartir una misma historia, están narradas de maneras muy distintas.
En el relato de Stevenson, el autor utiliza dos tipos de focalizaciones a lo largo de tres personajes para ir narrando la historia. Comienza la historia desde el punto de vista del Dr. Utterson, el abogado, y su odisea para descubrir qué le está sucediendo a su amigo Jekyll. Utiliza una focalización externa ya qué cuenta la historia según el notario va descubriendo nuevas pistas. Más tarde, cuando el libro está alcanzando su fin, Stevenson narra la historia de Lanyon con la misma focalización pero decide cambiar a una focalización interna como protagonista cuando Jekyll cuenta qué lo lleva a crear la poción mágica. Estos tipos de focalizaciones permiten ir descubriendo poco a poco la verdadera relación que Hary Jekyll tiene con Edward Hyde al más puro estilo policial.
"Mr. Utterson, el abogado, era hombre de semblante adusto jamás iluminado por una sonrisa, frío, parco y reservado en la conversación, torpe en la expresión del sentimiento, enjuto, largo, seco y melancólico, y, sin embargo, despertaba afecto." (Comienzo de la historia)
"Nací en el año de 18...," (El relato completo del caso por Harry Jekyll)
Por su parte, la película condensa toda la historia en una sola mirada, la de Mary Reily. La historia se va construyendo a través de paralelismos qué Hyde busca crear entre su persona y el padre de Mary. Así, Frears va creando una situación de confusión en el espectador ya qué no sabe a quién escogerá Mary y menos se imagina que son la misma persona.
Un ejemplo de esto es en la película cuando Mary le lleva el desayuno a la habitación a Jekyll para encontrarse con Hyde que rompe una taza y le dice "Mira lo que me has hecho hacer" al igual que su padre cuando era una niña. Escena
Hacia el final, ambos Hyde deciden suicidarse pero por dos razones muy distintas. Irónicamente, el Hyde de Stevenson logra deshacerse del bondadoso Harry solo para verse expuesto y sin una manera tan efectiva de esconderse. Por esto, y acorralado por Stevenson y Poole, se suicida. En la película, por otro lado, Hyde decide suicidarse tomando veneno porque está enamorado de Mary y se transforma para que lo sufra Harry.
"Los músculos de su rostro se movían aún débilmente, pero la vida le había abandonado ya, y de la ampolla que aferraba en su mano y el fuerte olor a almendras que flotaba en la habitación, Utterson dedujo que se hallaban ante el cuerpo de un suicida."